El centro de menores migrantes de Santa Úrsula ha sido desmantelado en pocas horas debido a la prohibición del Ayuntamiento de utilizar el espacio del gimnasio como alojamiento. Según un informe de la oficina técnica municipal, el gimnasio Hara Sport, ubicado en un sótano no residencial en la calle Rambla Doctor Pérez, no cumple con las condiciones de habitabilidad necesarias para este fin.
El proyecto había generado controversia desde hace cuatro meses entre los residentes locales, diversas administraciones y la comunidad de propietarios del edificio María Victoria, donde se planeaba instalar el centro. A pesar de contar con una subvención del Gobierno de Canarias y el aval de una ONG llamada Quorum Social 77, encargada de su gestión, el centro no pudo abrir debido al informe desfavorable y a la falta de permisos necesarios.
El alcalde de Santa Úrsula, Juan Acosta, confirmó que el ayuntamiento no estaba al tanto del proyecto hasta que recibió una carta de la comunidad de propietarios. Tras consultar con la consejería de Bienestar Social del Gobierno autónomo, se determinó que no había autorización para establecer un centro de estas características en el lugar.
Aunque las instalaciones del centro contaban con una amplia terraza al aire libre y áreas adecuadas para dormitorios, oficinas, baños diferenciados por género y zonas de recreo, la falta de los permisos locales y regionales impidió su operatividad. La ONG involucrada había realizado una inversión significativa para adecuar el espacio, pero no cumplió con los requisitos legales necesarios antes de iniciar el proyecto.
La situación se complica aún más debido al reciente aumento de la crisis migratoria en las Islas Canarias, con conversaciones en curso entre el Ejecutivo y los gobiernos locales para habilitar recursos adecuados, como la posibilidad de montar carpas en los muelles para atender a los migrantes.
En resumen, el centro de menores migrantes en Santa Úrsula fue desmantelado tras enfrentarse a obstáculos legales y administrativos que impidieron su apertura, a pesar de estar equipado y contar con financiamiento gubernamental.
