En el último Consejo de Gobierno del Cabildo de Tenerife, celebrado antes de las vacaciones de verano, se aprobó un importante incremento en la financiación destinada a la solución de los vertidos de aguas fecales en la Isla. Este aumento, que asciende a 63,5 millones de euros, se realiza con el fin de cubrir los crecientes costes asociados a la mejora de los sistemas de saneamiento y depuración de aguas.
La adenda aprobada con Aguas de las Cuencas de España (Acuaes) eleva el presupuesto total de estas obras hidráulicas de 170 millones a 233,5 millones de euros. El proyecto incluye cinco grandes obras, la mayoría de las cuales ya han comenzado, y que son cruciales para el tratamiento adecuado de las aguas residuales en Tenerife.
La presidenta insular, Rosa Dávila, y el vicepresidente, Lope Afonso, explicaron que el Cabildo, junto con el Consejo Insular de Aguas de Tenerife (Ciatf), ha estado negociando activamente con el Estado a través de Acuaes para lograr este significativo aumento en la inversión. Dávila enfatizó que el incremento es esencial para afrontar los costes que han aumentado debido a la subida de precios en los materiales y servicios necesarios para llevar a cabo las obras.
El objetivo de este esfuerzo es resolver los problemas de incumplimiento con las directivas europeas relacionadas con el tratamiento de vertidos residuales urbanos y la protección de los recursos hídricos. Además, se busca incrementar la regeneración del agua para su reutilización, especialmente en el riego agrícola, contribuyendo así a una gestión más sostenible del agua en la Isla.
La aprobación de esta inversión es un paso importante hacia la mejora de la infraestructura hídrica en Tenerife y refleja el compromiso de las administraciones con el medio ambiente y la calidad de vida de sus ciudadanos. La comunidad espera que estas obras no solo mitiguen los problemas actuales de vertidos, sino que también proporcionen soluciones a largo plazo para la gestión del agua en la región.
