John Shurna, uno de los jugadores más queridos por la afición del Club Baloncesto Gran Canaria, se ha despedido oficialmente del equipo tras seis temporadas defendiendo la camiseta amarilla. En una emotiva carta publicada en sus redes sociales, el ala-pívot expresó su gratitud a la isla, al club y a los seguidores por todos los momentos compartidos.
Shurna reconoció que le cuesta decir adiós y destacó el crecimiento tanto personal como profesional que ha experimentado durante su estancia en la isla. «Ha sido un privilegio vivir en este lugar y sentir el apoyo de todos ustedes», afirmó.
El jugador estadounidense también tuvo palabras de afecto para sus compañeros, entrenadores, personal del club y, especialmente, para los aficionados, a quienes considera una parte fundamental de su trayectoria. “Gracias por dejarme formar parte de esta familia durante seis años inolvidables”, concluyó.
Aunque no reveló cuál será su próximo destino, deja abierta la puerta a un futuro regreso, al menos para visitar el que considera su hogar lejos de casa.
