Santa Cruz de Tenerife cerró ayer las celebraciones dedicadas a su patrón, Santiago Apóstol, y al histórico episodio de 1797, cuando la ciudad resistió el ataque británico liderado por Horacio Nelson, permaneciendo invicta. Los actos culminaron con un homenaje a los defensores caídos de aquella defensa heroica.
Durante la ceremonia final se entregaron las Medallas de la Gesta 2025 a la Policía Local de Santa Cruz, que celebra su 185 aniversario, y a la Villa de La Orotava, en reconocimiento a su participación en la defensa de la ciudad. También hubo ofrenda floral, himnos nacionales y una descarga de salvas militares como forma de homenaje.
El alcalde hizo hincapié en el compromiso de la ciudad por mantener reciente la memoria de la gesta, destacando la emoción y valor histórico que caracterizan estos días. El acto contó con la participación del Regimiento Fijo de Puerto Rico como colaborador destacado en las actividades.
Desde el viernes comenzaron los eventos festivos con eucaristía, procesión, rendición de honores y homenaje al Pendón de la ciudad acompañado por una descarga de fusilería. El sábado se inauguró un campamento histórico con actividades como exhibiciones de artillería, instrucción militar, duelos a espada, artesanía y recreaciones históricas que animaron la plaza de la Candelaria.
La noche del sábado contó con un desfile y recreación nocturna dramatizada, incluyendo proyecciones audiovisuales en la fachada del Museo de la Naturaleza y Arqueología. Se escenificaron escenas emblemáticas como el ataque británico al cañón, los combates en el barranco de Santos, el avance inglés por calle Padre Moore, su retirada hasta la plaza de la Candelaria, y la batalla final frente al Palacio de Carta.
El último acto de la programación consistió en la firma simbólica de las capitulaciones, con representación teatral, entrega de medallas y cierre de unas jornadas que fusionaron historia, cultura y tradición en homenaje a uno de los capítulos más emblemáticos de la ciudad.
